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miércoles, 29 de febrero de 2012

Ordinario de la Misa: Jueves I Semana de Cuaresma. Ciclo B. 01 de Marzo, 2012

Ordinario de la Misa: Jueves I Semana de Cuaresma. Ciclo B. 01 de Marzo, 2012
De todo corazón te damos gracias, Señor
Feria de la 1a. semana de Cuaresma
Crea en mí, Señor, un corazón puro
Antífona de Entrada
Señor, oye mis palabras, escucha mi lamento, haz caso de mi voz suplicante, Rey mío y Dios mío.
Oración Colecta
Oremos:
Puesto que sin ti nada podemos, concédenos, Señor, luz para distinguir siempre el bien y valor para ponerlo en práctica, a fin de que podamos vivir según tu voluntad.
Por nuestro Señor Jesucristo...
Amén.

Primera Lectura
Lectura del libro de Ester
(14,1.3-5.12-14)

"Enluten su corazón y no sus vestidos"
Esto dice el Señor:
«Conviértase a mí de todo corazón, con ayunos, lágrimas y llantos. Desgarren su corazón, no sus vestiduras; conviértanse al Señor, su Dios, porque él es clemente y misericordioso, lento a la ira, rico en amor y siempre dispuesto a perdonar. Quizás sí los perdonará una vez más y los bendecirá de nuevo, permitiendo que presenten ofrenda y libación al Señor, su Dios.
Toquen la trompeta de Sión, proclamen un ayuno, convoquen una asamblea, reúnan al pueblo, purifiquen la comunidad, congreguen a los ancianos, reúnan a los pequeños y a los niños de pecho. Deje el recién 
casado su habitación y la recién casada su cámara nupcial.
Entre el patio del templo y el altar lloren los sacerdotes, ministros del Señor, diciendo:
“Perdona, Señor, a tu pueblo y no entregues tu nación al desprecio, a la burla de las gentes. 
Por qué han de decir los paganos: ¿Dónde está su Dios?”»
El Señor se apiadó de su tierra, y perdonó a su pueblo.

Palabra de Dios.
Te alabamos, Señor.

Salmo Responsorial Salmo 137
De todo corazón
te damos gracias, Señor.
De todo corazón te damos gracias, Señor, porque escuchaste nuestros ruegos. Te cantaremos delante de tus ángeles, te adoraremos en tu templo.
De todo corazón
te damos gracias, Señor.
Señor, te damos gracias por tu lealtad y por tu amor: siempre que te invocamos nos oíste y nos llenaste de valor.
De todo corazón
te damos gracias, Señor.
Que todos los reyes de la tierra te reconozcan, al escuchar tus prodigios. Que alaben tus caminos, porque tu gloria es inmensa.
De todo corazón
te damos gracias, Señor.
Tu mano, Señor, nos pondrá a salvo, y así concluirás en nosotros tu obra. Señor, tu amor perdura eternamente; obra tuya soy, no me abandones.
De todo corazón
te damos gracias, Señor.

Aclamación antes del Evangelio
Honor y gloria a ti,
Señor Jesús.
Crea en mí, Señor, un corazón puro y devuélveme tu salvación, que regocija.
Honor y gloria a ti,
Señor Jesús.

Evangelio
† Lectura del santo Evangelio
según san Mateo (7, 7-12)
Gloria a ti, Señor.
En aquel tiempo, Jesús dijo a sus discípulos:
“Pidan y se les dará; busquen y encontrarán; toquen y se les abrirá. Porque todo el que pide, recibe; el que busca, encuentra; y al que toca, se le abre.
¿Hay acaso entre ustedes alguno que le dé una piedra a su hijo, si éste le pide pan? Y si le pide pescado, ¿le dará una serpiente? Si ustedes, a pesar de ser malos, saben dar cosas buenas a sus hijos, con cuanta mayor razón el Padre, que está en los cielos, dará cosas buenas a quienes se las pidan.
Traten a los demás como quieren que ellos los traten a ustedes. En esto se resumen la ley y los profetas”.
Palabra del Señor.
Gloria a ti, Señor Jesús.

Comentario:
Un aspecto fundamental de la oración propuesta por Jesús es la confianza en la misericordia de Dios. La oración no consiste en presentar la lista de peticiones a Dios. Es necesario poner toda la vida en función del proyecto del Reino. Pedir, buscar y llamar, tres verbos que indican colocarse en acción. No basta sólo con pedir. Es necesario buscar a Jesús. Es urgente llamar a su puerta. Una verdadera oración nos tiene que llevar necesariamente a colocar la confianza en Dios, pero al mismo tiempo, procurar hacer su voluntad sobre nuestras vidas y sobre la vida de nuestros pueblos. Y la voluntad de Dios es siempre salvífica, liberadora. Sabemos que personas que se comprometieron hasta el fondo con la propuesta de Jesús eran personas de profunda oración como Francisco de Asís, Teresa de Calcuta o monseñor Oscar Romero. En segundo lugar, Jesús presenta una exigencia que se desprende de una auténtica oración fundada en el seguimiento y la fidelidad; es la equidad en el trato con los demás. No se puede orar y ser injusto, no se puede orar y ser violento, no se puede orar y ser corrupto. ¿Cómo anda nuestra coherencia entre vida y oración?

Oración sobre las Ofrendas
Acepta, Señor, en tu bondad las ofrendas y súplicas que te presentamos, y convierte a ti nuestros corazones.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Amén.
Prefacio de Cuaresma II
La penitencia de espíritu
El Señor esté con ustedes.
Y con tu espíritu.
Levantemos el corazón.
Lo tenemos levantado hacia el Señor.
Demos gracias al Señor, nuestro Dios.
Es justo y necesario.
En verdad es justo y necesario, es nuestro deber y salvación darte gracias siempre y en todo lugar, Señor, Padre santo, Dios todopoderoso y eterno.
Porque misericordiosamente estableciste este tiempo especial de gracia para que tus hijos busquen de nuevo la pureza del corazón y así, libres de todo afecto desordenado, de tal manera se apliquen a las realidades transitorias, que más bien pongan su corazón en las que duran para siempre.
Por eso, con los ángeles y los arcángeles y con todos los coros celestiales, cantamos sin cesar el himno de tu gloria:
Santo, Santo, Santo...

Antífona de la Comunión
Todo el que pide, recibe; el que busca, encuentra; y al que toca, se le abrirá.
Oración después de la Comunión
Oremos:
Concédenos, Señor Dios nuestro, que el sacramento que nos has dado como ayuda para nuestra salvación, nos sirva de auxilio tanto para esta vida como para la futura.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Amén.

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