Buscar este blog

martes, 24 de enero de 2012

Evangelio del Miércoles III Semana Tiempo Ordinario. Ciclo B. 25 Enero, 2012

Evangelio del Miércoles III Semana Tiempo Ordinario. Ciclo B. 25 Enero, 2012
Lectura del Santo Evangelio, según San Marcos 16,15-18
Gloria a ti, Señor
En aquel tiempo, se apareció Jesús a los Once y les dijo: "Id al mundo entero y proclamad el Evangelio a toda la creación. El que crea y se bautice se salvará; el que se resista a creer será condenado. A los que crean, les acompañarán estos signos: echarán demonios en mi nombre, hablarán lenguas nuevas, cogerán serpientes en sus manos y, si beben un veneno mortal, no les hará daño. Impondrán las manos a los enfermos, y quedarán sanos."
Palabra del Señor
Gloria a ti, Señor Jesús
Comentario:
Debemos entender la conversión como un cambio de mentalidad. De hecho, la palabra griega equivalente significa literalmente “transformar la mente” para creer en el evangelio. Sin ese cambio de mentalidad, el evangelio es una locura o una necedad, como lo dice el mismo Pablo. Si estamos completamente alienados por los valores del mundo presente no podremos aceptar la libertad y la verdad de Jesús. O, a todo más, las veremos como algo que le queda bien a él, pero no a las personas que hoy lo siguen. La conversión de Pablo recorre ese mismo camino. Él es un fanático religioso, con educación superior y con todos los medios para llegar a ser un personaje famoso dentro de sus copartidarios; sin embargo, se ve contrariado por el llamado de Jesús, que lo invita a abandonar todo para abrazar el evangelio. Su cambio es tan radical que incluso hoy nos desconcierta. Nosotros, como Pablo, nos aferramos a los valores del mundo presente, incluso a aquellos que consideramos más legitimados por la costumbre religiosa, pero debemos preguntarnos si esos puntos de referencia y esos valores coinciden con la simple y demoledora exigencia del evangelio: el amor y la justicia.

No hay comentarios: